jueves, 9 de septiembre de 2010

Los "conspiranoicos" sostenella y no enmendalla...(0)


Primero fué...

Autism just as common in adults, so MMR jab is off the hook


Luego...

From the Lancet to the GMC: how Dr Andrew Wakefield fell from grace


Ainhoa Iriberri – Público

La prestigiosa revista médica The Lancet se retractó ayer de un estudio publicado en sus páginas en 1998, que ligaba la administración de la vacuna triple vírica (MMR) que protege del sarampión, las paperas y la rubeola con una alteración gastrointestinal y el autismo. La decisión se tomó después de que la edición on line del British Medical Journal recogiera el lunes la declaración formal del Colegio General Médico Británico (GMC) pidiendo a la revista que se retractara, para que se deje de hablar del estudio como un trabajo científico.

Con esta decisión parece finalizar una historia que, aún hoy, enfrenta a partidarios y detractores de Andrew Wakefield, el gastroenterólogo del Royal Free Hospital de Londres que firmó el estudio y que, según concluyó la semana pasada el propio GMC tras una investigación de más de dos años, actuó de forma deshonesta e irresponsable.

The Lancet se retracta del estudio que vinculaba vacunas con el autismo

3 Febrero, 2010
Ahora...

WASHINGTON (CNN) -- A special court ruled Thursday that evidence presented in three cases by parents of children with autism did not prove a link between autism and certain early childhood vaccines.


http://edition.cnn.com/2009/HEALTH/02/12/autism.vaccines/



Y los "conspiranoicos" sin rectificar...

Las vacunas contra la gripe A llevan un peligroso conservante

2 comentarios:

Miguel Jara dijo...

Fernando, muy apropiado ese concepto de "conspiranoicos" que aunque cada vez más utilizado para intentar deslegitimar a quienes no aceptan el discurso único, es muy apropiado para esos 52 individuos que cito en la info de mi blog que tú ofreces y que proviene del abogado Kennedy, sobrino del malogrado presidente de USA y que vuelvo a ofrecer por si alguien no llega hasta la segunda parte de mi post. Un saludo:

Los laboratorios conocen los daños en la salud del mercurio de las vacunas. En 2005, Robert F. Kennedy Jr, abogado de prestigio en temas de salud y ecología y sobrino del presidente de Estados Unidos John F. Kennedy, publicó su informe Deadly Immunity (Inmunidad mortal). Entre otras muchas informaciones, el trabajo ofrece datos sobre una reunión desarrollada en Simpsonwood (Georgia, EE.UU.), en junio de 2000. La reunión fue convocada por el Centro para el Control de las Enfermedades (CDC), sin comunicados públicos, tan sólo las invitaciones privadas a 52 asistentes. Entre ellos: funcionarios de alto nivel del CDC y de la FDA (la agencia de medicamentos estadounidense), el especialista en vacunas más destacado de la Organización Mundial de la Salud y ejecutivos de los principales fabricantes de vacunas, como Merck, Aventis, GlaxoSmithKline y Wyeth (tres de estos laboratorios están demandados en España ante la Audiencia Nacional).

¿Cuál era el objetivo de tan inquietante cita? Una investigación había suscitado dudas sobre la seguridad de una gran cantidad de vacunas administradas a bebés y niños pequeños. El epidemiólogo del CDC Thomas Verstraeten había analizado una enorme base de datos con los historiales médicos de 100.000 niños y había descubierto que un conservante con mercurio incorporado a las vacunas -el Timerosal- parecía ser elresponsable de un aumento espectacular de los casos de trastornos por déficit de atención, hiperactividad y autismo en niños. En ese momento en EE.UU. había 4.200 demandas de padres de niños autistas.

Tras analizar numerosas estadísticas que confirmaban dichos datos aquellos funcionarios y representantes de los laboratorios, en lugar de tomar medidas para alertar al público y eliminar el suministro de Timerosal de las vacunas, dedicaron buena parte del tiempo a discutir sobre cómo ocultar una información tan importante para la ciudadanía y en los años siguientes así lo hicieron.

Más info: El libro La salud que viene. Nuevas enfermedades y el marketing del miedo (Península, 2009) contiene un capítulo específico sobre este asunto, además de otros capítulos sobre cómo se ha hecho la campaña de lobby y marketing del miedo de la vacuna contra el virus del papiloma humano o sobre cómo se inventan enfermedades.

Unknown dijo...

Qué raro, Miguelito citándose a si mismo, haciendo publicidad de su libro y dejando caer que hay farmacéuticas y médicos "malos", los que no comulgan con la pseudomedicina actual, y "buenos", los que sí lo hacen y por supuesto, nunca por el vil metal.

Una pena que se haya demostrado que los responsables de dicho estudio estaban afiliados a ciertos lobbies pseudomédicos, y que la alerta artificial creada alrededor de las vacunas y su relación con el autismo no respondía más que a intereses comerciales.

Uy lo que he dicho, que los médicos "buenos" no son más que mercenarios. ¡Herejía!